VIERNES 15

Verde/Rojo De Feria, Misa votiva del misterio de la Santa Cruz MR, p. 1172 (727) / Lecc I, p. 498

Otros santos: Probo de Rieti, obispo. Beatos: Tito Livio Chinezu, presbítero, obispo y mártir; Valentín Palencia Marquina, presbítero y mártir.

BEATO TITO LIVIO CHINEZU, ambos nombres del latín Titus y Livius, nombres de gens romanas (1904-1955). Presbítero, obispo y mártir. Nativo de Maioresti, Rumania. Cursó estudios en el Colegio Sant' Atanasio en Roma donde obtuvo el Doctorado en Filosofía y Teología y recibió el Orden sacerdotal en 1930. Al año siguiente regresó a su patria a la población de Blaj, donde ejerció la docencia en la Escuela Primaria Scuola Normale di Maestrí. Seis años después se le transfirió a la Academia Teológica y en 1947 desempeñó su labor apostólica y magisterial en Bucarest. Desde 1948, el partido socialista rumano tomó el mando del país y determinó acabar con todas las confesiones religiosas del país. Los comunistas trataron de que los sacerdotes desconocieran la autoridad del Papa. El mes de agosto se ordenó la clausura de las instituciones católicas, seminarios, escuelas, hospitales y hospicios. En octubre la Iglesia Greco-católica fue disuelta y sus pertenencias se entregaron a la Iglesia Ortodoxa Rumana. Los ministros que no se afiliaron a la nueva iglesia, como los obispos greco-católicos Anton Durcovici, Ioan Ploscaru e Ioan Suciu y un buen número de sacerdotes, fueron arrestados por agentes de la Securitate (policía comunista) encarcelados e inmolados. Víctima de la persecución en octubre de ese año el padre Chinezu fue hecho prisionero y encerrado, con otros presbíteros, en el monasterio de Neamt; después se le confinó en Caldarusani, ahí en diciembre de 1949 recibió la ordenación episcopal de manos de obispos presos. El nuevo obispo fue llevado a la penitenciaría Sighetul Marmatiei, donde se le condenó a cumplir trabajos forzados. Dañado por las crueles faenas y las inhumanas condiciones del penal, cayó enfermo. Se le negó toda atención y fue aislado en una húmeda y fría celda en la cual falleció el 15 de enero de 1955. Para evitar revueltas se le enterró de forma clandestina. Fue beatificado el 2 de junio de 2019, durante el pontificado del papa Francisco. La memoria del grupo de los siete obispos sacrificados entre 1950 y 1970 se recuerda el 2 de junio.

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