DOMINGO 27

Blanco Domingo I después de la Navidad [Se omite la fiesta de san Juan, apóstol y evangelista] MR, p. 157 (180) / Lecc. I, pp. 141-142 Y 139

Otros santos: Beato Francisco Spoto, presbítero de la Congregación de los Siervos de los Pobres y mártir; Sara Salkanhazi, maestra, periodista y mártir.

BEATO FRANCISCO SPOTO, del italiano antiguo, "franco", "francés" (1924-1964). Presbítero de la Congregación de los Siervos de los Pobres y mártir. Nativo de Raffadali, de la isla italiana de Sicilia. En 1936 se integró al seminario de la Congregación de los Misioneros Siervos de los Pobres ubicado en Palermo. Recibió el Orden Sacerdotal en 1951 y siete años después fue electo Superior de su Instituto religioso. Su humildad, prudencia, discreción y tenacidad en conseguir sus objetivos y los altos ideales de su Orden valieron para que sus compañeros le apodaran "el Alemán" o "la Piedra". En 1964, viajó a Biringi, República Democrática del Congo, adonde llevó palabras de aliento a los misioneros de su Hermandad quienes pasaban por una difícil situación debido a conflictos civiles y xenofóbicos al desatarse una revuelta organizada por el grupo maoísta de los Simba. El 3 de diciembre logró escapar de los rebeldes; sin embargo, fue hallado por los guerrilleros quienes le golpearon y dejándole por muerto lo abandonaron, posteriormente piadosos nativos le socorrieron. A consecuencia del ataque el padre Francisco quedó inválido y con graves secuelas en su salud física y emocional, a pesar de los cuidados a los pocos días y como consecuencia de la golpiza falleció en la población de Erira. Fue beatificado por Benedicto XVI en abril de 2007.
Plegaria a la Sagrada Familia (escrita por el papa Francisco): Jesús, María y José en vosotros contemplamos el esplendor del verdadero amor, a vosotros, confiados, nos dirigimos. Santa Familia de Nazaret, haz también de nuestras familias lugar de comunión y cenáculo de oración, auténticas escuelas del Evangelio y pequeñas iglesias domésticas. Santa Familia de Nazaret, que nunca más haya en las familias episodios de violencia, de cerrazón y división; que quien haya sido herido o escandalizado sea pronto consolado y curado. Santa Familia de Nazaret, haz tomar conciencia a todos del carácter sagrado e inviolable de la familia, de su belleza en el proyecto de Dios. Jesús, María y José, escuchad, acoged nuestra súplica. Amén.

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