Santa Misa del día: Lunes 4 de Septiembre de 2017
Verde De Feria o Misa votiva "Del Espíritu Santo" B MR p. 1125 (1171) / Lecc. II, p. 744 Otros santos: Moisés, profeta y legislador; Bonifacio, papa. Beato José (Giuseppe) Toniolo, economista y sociólogo laico.
NADIE ES PROFETA EN SU TIERRA
1 Tes 4, 13-18; Lc 4, 16-30
La escena de la predicación de Jesús en la sinagoga de Nazaret ocupa un lugar significativo en el conjunto del Evangelio. Además de funcionar como discurso programático, el Señor Jesús se presenta como una figura profética que viene a revelar el rostro del Dios que libera y se compadece de los pobres. No abrió el libro al azar, hubo una intencionalidad: Jesús conocía las escrituras y quería apropiarse del pasaje para presentarse públicamente como el que daba cumplimiento a dicha misión. Su breve homilía así lo confirma: hoy se ha cumplido este pasaje. La reacción inicial de los oyentes es de entusiasmo, en seguida, de asombro y luego de rechazo. Jesús no ha cumplido en Nazaret los signos que sí ha realizado en otros sitios de Galilea. Esta forma de proceder tiene una intencionalidad: mostrar que Israel no tiene derechos exclusivos ante Dios. Todos los pueblos le interesan por igual.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Jn 14, 26; 15, 26
Cuando venga el Espíritu de la verdad, Él los guiará hasta la verdad plena, dice el Señor.
ORACIÓN COLECTA
Te rogamos, Señor, que el Espíritu Santo, que procede de ti, ilumine nuestras mentes y las conduzca hasta la verdad plena, como lo prometió tu Hijo. Él, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos.
O bien:
Señor Dios, ante quien todo corazón está abierto y todo propósito se descubre, a quien ningún secreto se oculta, purifica, por la efusión del Espíritu Santo, los proyectos de nuestro corazón, para que merezcamos amarte con toda perfección y alabarte dignamente. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
A los que murieron en Jesús, Dios los llevará con Él.
De la primera carta del apóstol san Pablo a los tesalonicenses: 4, 13-18
Hermanos: No queremos que ignoren lo que pasa con los difuntos, para que no vivan tristes, como los que no tienen esperanza. Pues, si creemos que Jesús murió y resucitó, de igual manera debemos creer que, a los que murieron en Jesús, Dios los llevará con Él.
Lo que les decimos, como palabra del Señor, es esto: que nosotros, los que quedemos vivos para cuando venga el Señor, no tendremos ninguna ventaja sobre los que ya murieron.
Cuando Dios mande que suenen las trompetas, se oirá la voz de un arcángel y el Señor mismo bajará del cielo. Entonces, los que murieron en Cristo resucitarán primero; después nosotros, los que quedemos vivos, seremos arrebatados, juntamente con ellos entre nubes, por el aire, para ir al encuentro del Señor, y así estaremos siempre con Él. Consuélense, pues, unos a otros con estas palabras.
Palabra de Dios. T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 95, 1.3. 4-5. 11-12a. 12b-13
R/. Cantemos al Señor con alegría.
Cantemos al Señor un nuevo canto, que le cante al Señor toda la tierra. Su grandeza anunciemos a los pueblos; de nación en nación sus maravillas. R/.
Cantemos al Señor, porque Él es grande, más digno de alabanza y más tremendo que todos los dioses paganos, que ni existen. Porque los falsos dioses son apariencia; ha sido el Señor quien hizo el cielo. R/.
Alégrense los cielos y la tierra, retumbe el mar y el mundo submarino. Salten de gozo el campo y cuanto encierra, manifiesten los bosques regocijo. R/.
Regocíjese todo ante el Señor, porque ya viene a gobernar el orbe. Justicia y rectitud serán las normas con las que rija a todas las naciones. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Lc 4, 18
R/. Aleluya, aleluya.
El Espíritu del Señor está sobre mí; Él me ha enviado para anunciar a los pobres la buena nueva. R/.
EVANGELIO
Me ha enviado para llevar a los pobres la buena nueva. —Nadie es profeta en su tierra.
Del santo Evangelio según san Lucas: 4, 16-30
En aquel tiempo, Jesús fue a Nazaret, donde se había criado. Entró en la sinagoga, como era su costumbre hacerlo los sábados, y se levantó para hacer la lectura. Se le dio el volumen del profeta Isaías, lo desenrolló y encontró el pasaje en que estaba escrito: El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido para llevar a los pobres la buena nueva, para anunciar la liberación a los cautivos y la curación a los ciegos, para dar libertad a los oprimidos y proclamar el año de gracia del Señor.
Enrolló el volumen, lo devolvió al encargado y se sentó. Los ojos de todos los asistentes a la sinagoga estaban fijos en Él. Entonces comenzó a hablar, diciendo: "Hoy mismo se ha cumplido este pasaje de la Escritura, que ustedes acaban de oír".
Todos le daban su aprobación y admiraban la sabiduría de las palabras que salían de sus labios, y se preguntaban: "¿No es éste el hijo de José?".
Jesús les dijo: "Seguramente me dirán aquel refrán: `Médico, cúrate a ti mismo, y haz aquí, en tu propia tierra, todos esos prodigios que hemos oído que has hecho en Cafarnaúm' ".
Y añadió: "Yo les aseguro que nadie es profeta en su tierra. Había ciertamente en Israel muchas viudas en los tiempos de Elías, cuando faltó la lluvia durante tres años y medio, y hubo un hambre terrible en todo el país; sin embargo, a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a una viuda que vivía en Sarepta, ciudad de Sidón. Había muchos leprosos en Israel, en tiempos del profeta Eliseo; sin embargo, ninguno de ellos fue curado sino Naamán, que era de Siria".
Al oír esto, todos los que estaban en la sinagoga se llenaron de ira, y levantándose, lo sacaron de la ciudad y lo llevaron hasta una barranca del monte, sobre el que estaba construida la ciudad, para despeñarlo. Pero Él, pasando por en medio de ellos, se alejó de allí.
Palabra del Señor. T. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira, Señor, con agrado, la ofrenda espiritual que traemos a tu altar, con todo el anhelo de nuestra devoción, y concede a tus siervos un espíritu recto, para que su fe te haga aceptables estos dones y su humildad los recomiende ante ti. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 15, 26; 16, 14
El Espíritu que procede del Padre, me glorificará, dice el Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, Dios nuestro, que te has dignado alimentarnos con manjares celestiales, infunde la suavidad de tu Santo Espíritu en lo más íntimo de nuestros corazones, para que se nos convierta en don eterno lo que en el tiempo hemos recibido devotamente. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Fuente: misalcatolico.com
Categoria: Misa por Año / Misal Catolico 2017 / Misal Catolico de septiembre 2017
Misal de Hoy Publicado: 2021-09-15T18:20:31Z | Modificado: 2021-09-15T18:20:31Z