Misal Católico

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Santa Misa del día: Domingo 3 de Septiembre de 2017

Verde XXII Domingo Ordinario [Se omite la memoria de San Gregorio Magno, Papa] MR p. 434 (432) / Lecc. II, p. 53

Otros santos: Marino de Rímini, anacoreta; Febes o Febe de Corinto, diaconisa.

LA VIDA QUE SE ENTREGA, SE RECOBRA

Jer 20, 7-9; Rom 12, 1-2; Mt 16, 21-27

Las llamadas confesiones de Jeremías nos permiten asomarnos a su drama interior. El profeta era una persona con una profunda sensibilidad poética y una gran emotividad. Los desaires y ataques de sus vecinos, lo mismo que la presencia discreta de Dios en su vida, lo dejaban cimbrando interiormente. El problema era que cada vez que comunicaba lo que Dios le revelaba, se metía en problemas con la gente, reacia a dejarse cuestionar. Jeremías estaba atrapado por Dios y no podía, aunque quisiera, dejar de servirle como su portavoz. Entregó su vida, que fue perdiendo entre cárceles y golpizas y finalmente fue obligado a marchar contra su voluntad hacia Egipto donde terminaron sus días. Animados por la esperanza en la resurrección, confesamos que el Padre ha revindicado a Jesús y ha admitido a la vida plena a sus profetas fieles, como sin duda lo fue Jeremías.

ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 85, 3. 5

Dios mío, ten piedad de mí, pues sin cesar te invoco: Tú eres bueno y clemente, y rico en misericordia con quien te invoca.

ORACIÓN COLECTA

Dios de toda virtud, de quien procede todo lo que es bueno, infunde en nuestros corazones el amor de tu nombre, y concede que, haciendo más religiosa nuestra vida, hagas crecer el bien que hay en nosotros y lo conserves con solicitud amorosa. Por nuestro Señor Jesucristo...

LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA

Soy objeto de burla por anunciar la palabra del Señor.

Del libro del profeta Jeremías: 20, 7-9

Me sedujiste, Señor, y me dejé seducir; fuiste más fuerte que yo y me venciste. He sido el hazmerreír de todos; día tras día se burlan de mí. Desde que comencé a hablar, he tenido que anunciar a gritos violencia y destrucción. Por anunciar la palabra del Señor, me he convertido en objeto de oprobio y de burla todo el día. He llegado a decirme: "Ya no me acordaré del Señor ni hablaré más en su nombre".
Pero había en mí como un fuego ardiente, encerrado en mis huesos; yo me esforzaba por contenerlo y no podía.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.


SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 62, 2. 3-4. 5-6. 8-9.

R/. Señor, mi alma tiene sed de ti.

Señor, tú eres mi Dios, a ti te busco; de ti sedienta está mi alma. Señor, todo mi ser te añora, como el suelo reseco añora el agua. R/.
Para admirar tu gloria y tu poder, con este afán te busco en tu santuario. Pues mejor es tu amor que la existencia; siempre, Señor, te alabarán mis labios. R/.
Podré así bendecirte mientras viva y levantar en oración mis manos. De lo mejor se saciará mi alma; te alabaré con jubilosos labios. R/.
Porque fuiste mi auxilio y a tu sombra, Señor, canto con gozo. A ti se adhiere mi alma y tu diestra me da seguro apoyo. R/.

SEGUNDA LECTURA

Ofrézcanse ustedes mismos como una ofrenda viva.

De la carta del apóstol san Pablo a los romanos: 12, 1-2

Hermanos: Por la misericordia que Dios les ha manifestado, los exhorto a que se ofrezcan ustedes mismos como una ofrenda viva, santa y agradable a Dios, porque en esto consiste el verdadero culto. No se dejen transformar por los criterios de este mundo, sino dejen que una nueva manera de pensar los transforme internamente, para que sepan distinguir cuál es la voluntad de Dios, es decir, lo que es bueno, lo que le agrada, lo perfecto.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Ef 1, 17-18
R/. Aleluya, aleluya.

Que el Padre de nuestro Señor Jesucristo ilumine nuestras mentes para que podamos comprender cuál es la esperanza que nos da su llamamiento. R/.

EVANGELIO

El que quiera venir conmigo, que renuncie a sí mismo.

Del santo Evangelio según san Mateo: 16, 21-27

En aquel tiempo, comenzó Jesús a anunciar a sus discípulos que tenía que ir a Jerusalén para padecer allí mucho de parte de los ancianos, de los sumos sacerdotes y de los escribas; que tenía que ser condenado a muerte y resucitar al tercer día.
Pedro se lo llevó aparte y trató de disuadirlo, diciéndole: "No lo permita Dios, Señor. Eso no te puede suceder a ti". Pero Jesús se volvió a Pedro y le dijo: "¡Apártate de mí, Satanás, y no intentes hacerme tropezar en mi camino, porque tu modo de pensar no es el de Dios, sino el de los hombres!".
Luego Jesús dijo a sus discípulos: "El que quiera venir conmigo, que renuncie a sí mismo, que tome su cruz y me siga. Pues el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda su vida por mí, la encontrará. ¿De qué le sirve a uno ganar el mundo entero, si pierde su vida? ¿Y qué podrá dar uno a cambio para recobrarla?
Porque el Hijo del hombre ha de venir rodeado de la gloria de su Padre, en compañía de sus ángeles, y entonces le dará a cada uno lo que merecen sus obras". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Se dice Credo.

PLEGARIA UNIVERSAL

Pidamos, hermanos, al Señor que dé oídos a las súplicas de su pueblo, diciendo: Escúchanos, Señor. (R/. Escúchanos, Señor.)
Tengamos presente, hermanos, en nuestras oraciones a la Iglesia santa, católica y apostólica, para que el Señor lo haga crecer en la fe, la esperanza y la caridad. Roguemos al Señor.
Oremos también por los pecadores, por los encarcelados, por los enfermos y por los que están lejos de sus hogares, para que el Señor los proteja, los libere, les devuelva la salud y los consuele. Roguemos al Señor.
Oremos también por las almas de todos los difuntos, para que Dios, en su bondad, quiera admitirlos en el coro de los santos y de los elegidos. Roguemos al Señor.
Pidamos también por los que nos disponemos a celebrar la Eucaristía, para que el Señor perdone sus culpas de los que vamos a participar de sus sacramentos, otorgue sus premios a los que ejercerán los diversos ministerios y dé la salvación a todos aquellos por los que ofrecemos nuestro sacrificio. Roguemos al Señor.
Escucha, Señor, las oraciones de tu pueblo y renuévanos con tu Espíritu de verdad, para que nunca nos dejemos engañar por las seducciones del mundo, y, como verdaderos discípulos de tu Hijo, sepamos discernir lo bueno, lo que te agrada, lo perfecto, y carguemos con la cruz, acompañando a Cristo, nuestra esperanza. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Que esta ofrenda sagrada, Señor, nos traiga siempre tu bendición salvadora, para que dé fruto en nosotros lo que realiza el misterio. Por Jesucristo, nuestro Señor. Prefacio para los domingos del Tiempo Ordinario.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 30, 20

Qué grande es tu bondad, Señor, que tienes reservada para tus fieles.

O bien: Mt 5, 9-10

Dichosos los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios. Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Saciados con el pan de esta mesa celestial, te suplicamos, Señor, que este alimento de caridad fortalezca nuestros corazones, para que nos animemos a servirte en nuestros hermanos. Por Jesucristo, nuestro Señor.

UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- En una sociedad donde predominan las relaciones individualistas, proponer la espiritualidad del Señor Jesús resulta una contracorriente. Negarse a sí mismo, cargar la cruz y perder la propia vida, se antoja algo carente de toda lógica para quienes profesan la llamada "cultura líquida". Quienes se cierran en la dimensión puramente mundana, sintonizan con una visión estrecha: "tú solo vives una sola vez" (you only live once), que los empuja a buscar la propia satisfacción a toda prisa y casi siempre, desentendiéndose del amor a los demás. De ahí que sea necesario comprender que el movimiento de creyentes que se agruparon en torno de Jesús era una organización minoritaria y modesta. Una existencia verdaderamente congruente con el espíritu de Jesús es completamente opuesta a una mentalidad egoísta. Sin embargo, quienes han corrido el riesgo de entregarse, sirviendo desayunos a los parientes de los enfermos en hospitales públicos o acogiendo sin segundas intenciones a los migrantes, saben que su vida no se ha desperdiciado, sino que se ha llenado de sentido.

Fuente: misalcatolico.com


Categoria: Misa por Año / Misal Catolico 2017 / Misal Catolico de septiembre 2017

Misal de Hoy Publicado: 2021-09-15T18:20:31Z | Modificado: 2021-09-15T18:20:31Z