Santa Misa del día: Lunes 3 de Junio de 2024
Rojo Memoria de los santos Carlos Lwanga y compañeros, mártires MR, p. 761 (747) / Lecc. I, p. 395
Otros santos: Juan Grande, religioso de la Orden Hospitalaria San Juan de Dios. Beatos: Diego Oddi, presbítero de la Orden de los Hermanos Menores; Andrés Caccioli, presbítero de la Orden de los Hermanos Menores.
La historia de los 22 mártires de Uganda hace revivir las Actas de los Mártires de los primeros siglos. Muchos de ellos acababan de convertirse al cristianismo. Cuatro fueron bautizados por Carlos Lwanga inmediatamente antes de martirizarlos. La mayor parte de ellos fueron quemados vivos en Numungongo (1886). Su edad oscilaba entre los 16 y 24 años, pero el más pequeño, Kizito, tenía sólo 13 años.
SOMOS PARTÍCIPES DE LA NATURALEZA DIVINA 2 Pedro 1, 1-7; Sal 90; Mc 12, 1-12
Mucho se ha discutido sobre el género literario de la segunda carta de Pedro, pero finalmente la mayoría de los exégetas ha logrado un acuerdo de que pertenece al género antiguo llamado una carta testamentaria. Es una carta escrita por uno que está a punto de morir y quiere dejar su testamento. El autor se identifica como san Pedro (véase 1, 13-15), aunque la carta probablemente es pseudoepígrafa, es decir, escrita por otros que quieren comunicar lo que, según ellos, el Apóstol hubiera pensado en sus últimos momentos. Qué es lo que el autor intenta comunicar? Quiere exhortar a los creyentes a que valoren su vocación. Es una vocación muy alta, ya que llama a los cristianos a ser partícipes de la naturaleza divina (v. 4). Hoy apreciamos la grandeza de esta vocación o es meramente otra convención social?
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sab 3,6-7.9
El Señor probó a sus elegidos como oro en el crisol y los aceptó como un holocausto. En el juicio de Dios serán premiados, pues la gracia y la misericordia son para sus elegidos.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que hiciste que la sangre de los mártires sea semilla de nuevos cristianos, concédenos que el campo de tu Iglesia, regado por la sangre de los san Carlos Lwanga y compañeros, produzca siempre abundante cosecha para ti. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Dios nos ha concedido los maravillosos bienes prometidos, que nos hacen partícipes de la naturaleza divina.
De la segunda carta del apóstol san Pedro: 1, 1-7
Yo, Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, les escribo a ustedes, los que han obtenido una fe tan preciosa como la nuestra, gracias a la justicia de Jesucristo, nuestro Dios y Salvador. Que abunden entre ustedes la gracia y la paz, por el conocimiento de Jesucristo, nuestro Señor. Su acción divina nos ha otorgado todo lo necesario para llevar una vida de santidad, mediante el conocimiento profundo del que nos ha llamado con su propia gloria y poder. Por medio de las cuales nos han sido otorgados también los grandes y maravillosos bienes prometidos, para que por ellos puedan ustedes escapar de la corrupción que las pasiones desordenadas provocan en el mundo, y lleguen a participar de la naturaleza divina. Por eso, esfuércense en añadir a su buena fe, conducta; a la buena conducta, la inteligencia; a la inteligencia, el dominio propio; al dominio propio, la perseverancia; a la perseverancia, la piedad; a la piedad, el amor fraterno, y al amor fraterno, la caridad. Palabra de Dios.T. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 90, 1-2. 14-15ab.15c-16.R/. Tú eres mi Dios y en ti confío.
Tú, que vives al amparo del Altísimo y descansas a la sombra del Todopoderoso, dile al Señor: Tú eres mi refugio y fortaleza; tú eres mi Dios y en ti confío.R/. Puesto que tú me conoces y me amas, dice el Señor, yo te libraré y te pondré a salvo. Cuando tú me invoques, yo te escucharé yen tus angustias estaré contigo. R/. A quien se acoge a mí, dice el Señor, yo lo defenderé y colmaré de honores; lo haré disfrutar de larga vida y haré que pueda ver mi salvación.R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Ap 1, 5 R/. Aleluya, aleluya.
Señor Jesús, testigo fiel, primogénito de entre los muertos, tu amor por nosotros es tan grande, que has lavado nuestras culpas con tu sangre. R/.
EVANGELIO
Se apoderaron del hijo, lo mataron y arrojaron su cuerpo fuera de la viña.
Del santo Evangelio según san Marcos: 12, 1-12
En aquel tiempo, Jesús comenzó a hablar en parábolas a los sumos sacerdotes, a los escribas y a los ancianos y les dijo: Un hombre plantó una viña, la rodeó con una cerca, cavó un lagar, construyó una torre para el vigilante, se la alquiló a unos viñadores y se fue de viaje al extranjero. A su tiempo, les envió a los viñadores un criado para recoger su parte del fruto de la viña. Ellos se apoderaron de él, lo golpearon y lo devolvieron sin nada. Les envió otro criado, pero ellos lo descalabraron y lo insultaron. Volvió a enviarles otro y lo mataron. Les envió otros muchos y los golpearon o los mataron. Ya sólo le quedaba por enviar a uno, su hijo querido, y finalmente también se lo envió, pensando: A mi hijo sí lo respetarán. Pero al verlo llegar, aquellos viñadores se dijeron: Éste es el heredero; vamos a matarlo y la herencia será nuestra. Se apoderaron de él, lo mataron y arrojaron su cuerpo fuera de la viña. Qué hará entonces el dueño de la viña? Vendrá y acabará con esos viñadores y dará la viña a otros. Acaso no han leído en las Escrituras: La piedra que desecharon los constructores es ahora la piedra angular. Esto es obra de la mano del Señor, es un milagro patente? Entonces los sumos sacerdotes, los escribas y los ancianos, quisieron apoderarse de Jesús, porque se dieron cuenta de que por ellos había dicho aquella parábola, pero le tuvieron miedo a la multitud, dejaron a Jesús y se fueron de ahí. Palabra del Señor. T.Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al presentarte, Señor, nuestras ofrendas, te suplicamos, así como tus mártires prefirieron morir antes que ofenderte, nosotros vivamos consagrados a ti, entregados a servirte en tu altar. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 115, 15
A los ojos del Señor es muy penoso que mueran sus amigos.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Habiendo recibido, Señor, el divino sacramento, al conmemorar la victoria de tus santos mártires, te suplicamos que, lo que a ellos les permitió soportar los suplicios, a nosotros nos abstenga, en medio de las adversidades, constancia en la fe y en la caridad. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Fuente: misalcatolico.com
Categoria: Misa por Año / Misal Catolico 2024 / Misal Catolico de junio 2024
Misal de Hoy Publicado: 2024-05-30T22:27:58Z | Modificado: 2024-05-30T22:27:58Z