Santa Misa del día: Martes 2 de Julio de 2024
MARTES 2
Verde / Blanco Feria, Misa por los enfermos MR, p. 1156 (1148) / Lecc. II, p. 510
Otros santos: Monegunda de Tours, eremita; Otón de Bamberg, obispo; Bernardino Realino, presbítero de la Compañía de Jesús. Beatos: Columba Kang Wan-suk y 7 compañeros, mártires; Ignacio Choe In-Cheol, catequista y mártir.
EL SUEÑO QUE SALVA Am 3, 1-8; 4,11-12; Sal 5; Mt 8, 23-27
De acuerdo con el Concilio Vaticano II, todo lo que Jesús hizo y dijo irradiaba la salvación (Dei Verbum n. 4). Quizá esta verdad nos ayuda a observar algo sorprendente en nuestro Evangelio de hoy. Mientras que el relato de la tempestad en el mar es frecuentemente interpretado como otro signo del poder de Jesús, no debemos ignorar un detalle significativo: durante la tempestad, Jesús duerme (v. 24). No es este hecho profundamente humano lo que permite que la fe de los discípulos crezca? En los primeros momentos, su fe es probada por la tempestad. No obstante, tienen fe suficiente para despertar al Señor, creer en sus palabras y experimentar un aumento de fe. El sueño de Jesús es la ocasión para todo esto. Cuando Dios parece dormir hoy, quizá tiene un plan para nuestro crecimiento cristiano!
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 6, 3-4
Ten piedad de mí, Señor, porque desfallezco; sáname, Señor, porque mis huesos se quiebran y la enfermedad me aflige.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que quisiste que tu Unigénito cargara con nuestros sufrimientos para mostrarnos el valor de la enfermedad y la paciencia humana, escucha benignamente nuestras súplicas por los hermanos que se hallan enfermos y concede que los que están afligidos por el dolor, las penas y la enfermedad, no sólo se sientan elegidos entre aquellos proclamados dichosos, sino que también sepan que están unidos a Cristo en su pasión, para salvación del mundo. Por nuestro Señor Jesucristo...
O bien:
Dios todopoderoso y eterno, salvación perpetua de los que creen en ti, escucha nuestra oración por tus siervos, enfermos, para quienes imploramos el auxilio de tu misericordia, a fin de que, recuperada la salud, puedan ofrecerte su acción de gracias en tu Iglesia. Por nuestro Señor Jesucristo...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
El Señor ha hablado, quién no profetizará?
Del libro del profeta Amós: 3, 1-8; 4, 11-12
Escuchen estas palabras que el Señor les dirige a ustedes, hijos de Israel, y a todo el pueblo que hizo salir de Egipto: “Sólo a ustedes los elegí entre todos los pueblos de la tierra, por eso los castigaré con mayor rigor por todos sus crímenes. Acaso podrán caminar dos juntos, si no están de acuerdo? Acaso no ruge el león en la selva, cuando tiene ya su presa? Lanza su rugido el cachorro de león desde su cueva, si no ha cazado nada Cae el pájaro al suelo, sin que se le haya tendido una trampa? Se levanta del suelo la trampa, sin que haya atrapado algo? Se toca la trompeta en la ciudad, sin que se alarme la gente? Hay alguna desgracia en la ciudad, sin que el Señor la mande? Ciertamente el Señor no hace nada sin revelar antes su designio a sus profetas. Pues bien, ya ha rugido el león, quién no tendrá miedo? El Señor Dios ha hablado, quién no profetizará? Los he destruido a ustedes como a Sodoma y a Gomorra; ha quedado como un tizón sacado del incendio y no se han vuelto a mí, dice el Señor. Por eso te voy a tratar así, Israel, y porque así te voy a tratar, prepárate, Israel, a comparecer ante tu Dios”.Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 5, 5-6. 7. 8. R/. Enséñame, Señor, tu santidad.
Tú no eres, Señor, un Dios al que pudiera la maldad agradarle, ni el malvado es tu huésped ni ante ti puede estar el arrogante.R/. Al malhechor detestas, y destruyes, Señor, al embustero; aborreces al hombre sanguinario y a quien es traicionero.R/. Pero yo, por tu gran misericordia, entraré en tu casa y me postraré en tu templo santo con reverencia de alma.R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Sal 129, 5 R/. Aleluya, aleluya.
Confío en el Señor, mi alma espera y confía en su palabra.R/.
EVANGELIO
Dio una orden terminante a los vientos y al mar, y sobre vino una gran calma.
Del santo Evangelio según san Mateo: 8, 23-27
En aquel tiempo, Jesús subió a una barca junto con sus discípulos. De pronto se levantó en el mar una tempestad tan fuerte, que las olas cubrían la barca; pero él estaba dormido. Los discípulos lo despertaron, diciéndole: “Señor, sálvanos, que perecemos!” Él les respondió: “Por qué tienen miedo, hombres de poca fe?” Entonces se levantó, dio una orden terminante a los vientos y al mar, y sobrevino una gran calma. Y aquellos hombres, maravillados, decían: “Quién es éste, a quien hasta los vientos y el mar obedecen?” Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, cuya providencia dirige cada momento de nuestra vida, recibe las súplicas y las ofrendas con que imploramos tu misericordia en favor de nuestros enfermos, para que la preocupación de ahora por su enfermedad, se nos convierta pronto en gozo por su salud. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Col 1, 24
Completo en mi carne lo que falta a la pasión de Cristo, por el bien de su cuerpo, que es la Iglesia.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios nuestro, auxilio inefable en la enfermedad, ayuda con tu poder a estos hijos tuyos enfermos, para que, aliviados por tu misericordia, vuelvan a ocupar su lugar en la asamblea de tus fieles. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Fuente: misalcatolico.com
Categoria: Misa por Año / Misal Catolico 2024 / Misal Catolico de julio 2024
Misal de Hoy Publicado: 2024-06-30T20:19:30Z | Modificado: 2024-06-30T20:19:30Z