Santa Misa del día: Sábado 15 de Febrero de 2025
15 de febrero SÁBADO Feria * Verde
Misa de feria (la del domingo anterior o de cualquier domingo del Tiempo Ordinario) con las lecturas de hoy. También se puede celebrar la Misa que va a continuación o alguna otra votiva.
Compartir es lo cristiano
Dar es bueno, pero compartir es mejor; sin embargo, corremos el riesgo de acostumbrarnos sólo a dar o únicamente a recibir, prolongando así las desigualdades y perpetuando a los bienhechores. En cambio, cuando damos y recibimos se garantiza un proceso, tal vez lento, pero imparable para construir una sociedad más fraterna. El mensaje del evangelio de hoy encierra, entre otros, el segundo relato de la multiplicación de los panes; para focalizarlo se señala la compasión como punto de partida para compartir (v. 2); no es la lástima lo que está en el fondo del compartir fraterno, sino la misericordia, el dolor profundo a causa de los sufrimientos que padecen otros. Además, es indispensable la mutua colaboración, aunque sea poco de lo que se disponga, para evitar eternos paternalismos y patronazgos denigrantes. Por último reflexionemos que cuando se comparte sobra o mejor dicho siempre alcanza, no sólo para los afectados inmediatos, que eran cuatro mil en este caso, sino para todo aquel que quiera acercarse y sumarse al proyecto de fraternidad. Tal vez por esa razón Marcos menciona los siete canastos (v. 8), porque recalca el convencimiento de que cuando se comparte alcanza para los que están más allá de nuestro entorno e incluso va más allá de nuestras propias posibilidades.
¿Por qué no es suficiente con acostumbrarnos a dar? ¿Qué podemos hacer para compartir lo que tenemos y lo que somos?
MISA DE SANTA MARÍA EN SÁBADO Blanco
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Jdt 13, 18-19
Bendita eres tú, Virgen María, por obra de Dios Altísimo, sobre todas las mujeres de la tierra; porque tu nombre ha sido engrandecido para que la boca de los hombres no cese de alabarte.
ORACIÓN COLECTA
Al celebrar la gloriosa memoria de la santísima Virgen María, te pedimos, Señor, por su intercesión, que también nosotros logremos recibir la plenitud de tu gracia. Por nuestro Señor Jesucristo…
PRIMERA LECTURA
El Señor expulsó al hombre del jardín del Edén para que trabajara la tierra.
Del libro del Génesis: 3, 9-24
Después de que el hombre y la mujer comieron del fruto del árbol prohibido, el Señor Dios llamó al hombre y le preguntó: “¿Dónde estás?”. Éste le respondió: “Oí tus pasos en el jardín y tuve miedo, porque estoy desnudo, y me escondí”. Entonces le dijo Dios: “¿Y quién te ha dicho que estabas desnudo? ¿Has comido acaso del árbol del que te prohibí comer?”.
Respondió Adán: “La mujer que me diste por compañera me ofreció del fruto del árbol y comí”. El Señor Dios dijo a la mujer: “¿Por qué has hecho esto?”. Repuso la mujer: “La serpiente me engañó y comí”.
Entonces dijo el Señor Dios a la serpiente: “Porque has hecho esto, serás maldita entre todos los animales y entre todas las bestias salvajes. Te arrastrarás sobre tu vientre y comerás polvo todos los días de tu vida. Pondré enemistad entre ti y la mujer, entre tu descendencia y la suya; y su descendencia te aplastará la cabeza, mientras tú tratarás de morder su talón”.
A la mujer le dijo: “Multiplicaré las fatigas de tus embarazos y con dolores darás a luz a tus hijos. Tus impulsos te llevarán hacia tu marido y él te dominará”.
Al hombre le dijo: “Por haberle hecho caso a tu mujer y por haber comido del árbol del que te prohibí comer, maldito sea el suelo por tu culpa. Con fatiga sacarás de él tus alimentos todos los días de tu vida. Te producirá cardos y espinas y comerás de las hierbas del campo. Ganarás tu pan con el sudor de tu frente, hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella te saqué: eres polvo y en polvo te convertirás”.
El hombre le puso a su mujer el nombre de “Eva”, porque ella fue la madre de todos los vivientes.
El Señor Dios les hizo al hombre y a la mujer unas túnicas de pieles para que se las pusieran. El Señor Dios dijo: “Aquí está el hombre ya casi convertido en uno de nosotros, por el conocimiento del bien y del mal. Que no vaya ahora a extender la mano para tomar de los frutos del árbol de la vida, se los coma y viva para siempre”.
Entonces, el Señor Dios lo expulsó del jardín del Edén, para que trabajara el suelo, de donde había sido hecho. Y expulsado el hombre, colocó al oriente del jardín del Edén a unos querubines con unas espadas de fuego ardiente, para impedir la entrada hacia el árbol de la vida.
Palabra de Dios. R. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL Del salmo 89
R. Tú eres, Señor, nuestro refugio.
Desde antes que surgieran las montañas, y la tierra y el mundo apareciesen, existes tú, Dios mío, desde siempre y por siempre. R.
Tú haces volver al polvo a los humanos, diciendo a los mortales que retornen. Mil años para ti son como un día, que ya pasó; como una breve noche. R.
Nuestra vida es tan breve como un sueño; semejante a la hierba, que despunta y florece en la mañana y por la tarde se marchita y se seca. R.
Enséñanos a ver lo que es la vida y seremos sensatos. ¿Hasta cuándo, Señor, vas a tener compasión de tus siervos? ¿Hasta cuándo? R.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Mt 4, 4
R. Aleluya, aleluya.
No sólo de pan vive el hombre, sino también de toda palabra que sale de la boca de Dios. R.
EVANGELIO
La gente comió hasta quedar satisfecha.
Del santo Evangelio según san Marcos: 8, 1-10
En aquellos días, vio Jesús que lo seguía mucha gente y no tenían qué comer. Entonces llamó a sus discípulos y les dijo: “Me da lástima esta gente: ya llevan tres días conmigo y no tienen qué comer. Si los mando a sus casas en ayunas, se van a desmayar en el camino. Además, algunos han venido de lejos”.
Sus discípulos le respondieron: “¿Y dónde se puede conseguir pan, aquí en despoblado, para que coma esta gente?”. Él les preguntó: “¿Cuántos panes tienen?”. Ellos le contestaron: “Siete”.
Jesús mandó a la gente que se sentara en el suelo; tomó los siete panes, pronunció la acción de gracias, los partió y se los fue dando a sus discípulos, para que los distribuyeran. Y ellos los fueron distribuyendo entre la gente.
Tenían, además, unos cuantos pescados. Jesús los bendijo también y mandó que los distribuyeran. La gente comió hasta quedar satisfecha, y todavía se recogieron siete canastos de sobras. Eran unos cuatro mil. Jesús los despidió y luego se embarcó con sus discípulos y llegó a la región de Dalmanuta.
Palabra del Señor. R. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Te ofrecemos, Señor, este sacrificio de alabanza, al conmemorar llenos de gozo a la Madre de tu Hijo; y te pedimos que por este santo intercambio, se aumenten en nosotros los frutos de la redención eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio de santa María Virgen.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Lc 1, 48
Me llamarán dichosa todas las generaciones, porque Dios puso sus ojos en la humildad de su esclava.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Alimentados por este celestial banquete, te rogamos humildemente, Señor, que nos concedas confesar de palabra y con las obras a tu Hijo, nacido de la Virgen Madre. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LAS HORAS
Vísperas I del domingo: 2a semana del Salterio.
Tomo III: pp. 880 y 190; para los fieles: pp. 555 y 395;
edición popular: pp. 108 y 463 (471*).
* A partir de la edición 2016 de letra grande.
Fuente: misalcatolico.com
Categoria: Misa por Año / Misal Catolico 2025 / Misal Catolico de febrero 2025
Misal de Hoy Publicado: 2025-02-01T19:09:40Z | Modificado: 2025-02-01T19:09:40Z