Santa Misa del día: Viernes 1 de Agosto de 2025
SAN ALFONSO MARÍA DE LIGORIO
Obispo y doctor de la Iglesia
Memoria * – Blanco
Nació en Nápoles. Como sacerdote y obispo se consagró a anunciar el amor de Cristo. Fue un infatigable predicador y un confesor lleno de bondad. Fundó la congregación del Santísimo Redentor (1732) para evangelizar las zonas rurales. Su doctrina moral y sus escritos espirituales se han difundido ampliamente (1696-1787).
No despreciemos lo nuestro
El malinchismo es esa actitud de aprecio desmedido por lo extranjero y menosprecio de lo propio. Consiste en preferir lo ajeno únicamente por su origen, confiando en alguien por su apariencia física o procedencia más que por sus conocimientos o autenticidad. Este fenómeno no se limita a lo cultural o social, sino que también puede aplicarse a lo religioso.
Mateo narra que Jesús llegó a su tierra y fue recibido con escepticismo por sus propios paisanos. A pesar de su sabiduría y la realización de milagros, sus conciudadanos se preguntan con ironía de dónde provenía todo aquello. Su asombro inicial se transformó rápidamente en incredulidad, y como consecuencia, Jesús no realizó muchos milagros allí.
Este relato revela cómo los complejos de inferioridad pueden conducirnos a no valorar lo nuestro. Despreciamos lo conocido por considerarlo común o insignificante, mientras idealizamos lo externo simplemente por ser ajeno. Esta falta de confianza en nosotros mismos y nuestra incapacidad para reconocer lo valioso en lo cercano pueden obstaculizar la acción salvadora de Dios en nuestras vidas.
Reflexionemos: ¿por qué a veces despreciamos lo propio, incluso si es bueno y correcto? ¿Qué podemos hacer para apreciar lo nuestro sin caer en la soberbia y valorar lo ajeno (pueblos, culturas, personas) sin sentirnos inferiores?
ANTÍFONA DE ENTRADA
Cfr. Sir 44, 15. 14
Los pueblos proclamen la sabiduría de los santos, la Iglesia cante sus alabanzas; sus nombres vivirán por los siglos de los siglos.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que promueves siempre en tu Iglesia nuevos ejemplos de santidad, concédenos seguir de tal modo las huellas del admirable celo por las almas del obispo san Alfonso María de Ligorio, que también nosotros alcancemos con él la recompensa del cielo. Por nuestro Señor Jesucristo...
PRIMERA LECTURA
En las festividades del Señor se reunirán en asamblea litúrgica.
Del libro del Levítico: 23, 1. 4-11. 15-16. 27. 34-37
El Señor habló a Moisés y le dijo: “Éstas son las festividades del Señor, en las que convocarán a asambleas litúrgicas.
El día catorce del primer mes, al atardecer, es la fiesta de la Pascua del Señor. El día quince del mismo mes es la fiesta de los panes Ázimos, dedicada al Señor. Comerán panes sin levadura durante siete días. El primer día de éstos se reunirán en asamblea litúrgica y no harán trabajos serviles. Los siete días harán ofrendas al Señor. El séptimo día se volverán a reunir en asamblea litúrgica y no harán trabajos serviles.”
El Señor volvió a hablar a Moisés y le dijo: “Di a los hijos de Israel: Cuando entren en la tierra que yo les voy a dar y recojan la cosecha, le llevarán la primera gavilla al sacerdote, quien la agitará ritualmente en presencia del Señor el día siguiente al sábado, para que sea aceptada.
Pasadas siete semanas completas, contando desde el día siguiente al sábado en que lleven la gavilla para la agitación ritual, hasta el día siguiente al séptimo sábado, es decir, a los cincuenta días, harán una nueva ofrenda al Señor.
El día diez del séptimo mes es el día de la Expiación. Se reunirán en asamblea litúrgica, harán penitencia y presentarán una ofrenda al Señor.
El día quince de este séptimo mes comienza la fiesta de los Campamentos, dedicada al Señor, y dura siete días. El primer día se reunirán en asamblea litúrgica. No harán trabajos serviles. Los siete días harán ofrendas al Señor. El octavo día volverán a reunirse en asamblea litúrgica y a hacer una ofrenda al Señor. Es día de reunión religiosa solemne. No harán trabajos serviles.
Éstas son las festividades del Señor, en las que se reunirán en asamblea litúrgica y ofrecerán al Señor oblaciones, holocaustos y ofrendas, sacrificios de comunión y libaciones, según corresponde a cada día.”
Palabra de Dios.
R. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 80
R. Aclamemos al Señor, nuestro Dios.
Entonemos un canto al son de las guitarras y del arpa. Que suene la trompeta en esta fiesta que conmemora nuestra alianza.
R. Aclamemos al Señor, nuestro Dios.
Porque esta es una ley en Israel, es un precepto que el Dios de Jacob estableció para su pueblo, cuando lo rescató de Egipto.
R. Aclamemos al Señor, nuestro Dios.
“No tendrás otro dios fuera de mí, ni adorarás a dioses extranjeros. Pues yo, el Señor, soy el Dios tuyo, el que te sacó de Egipto, tu destierro.”
R. Aclamemos al Señor, nuestro Dios.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
1 Pedro 1, 25
R. Aleluya, aleluya.
La palabra de Dios permanece para siempre. Y ésa es la palabra que se les ha anunciado.
R. Aleluya.
EVANGELIO
¿No es éste el hijo del carpintero? ¿De dónde, pues, ha sacado esa sabiduría y esos poderes milagrosos?
Del santo Evangelio según san Mateo: 13, 54-58
En aquel tiempo, Jesús llegó a su tierra y se puso a enseñar a la gente en la sinagoga, de tal forma, que todos estaban asombrados y se preguntaban: “¿De dónde ha sacado éste esa sabiduría y esos poderes milagrosos? ¿Acaso no es éste el hijo del carpintero? ¿No se llama María su madre y no son sus hermanos Santiago, José, Simón y Judas? ¿Qué no viven entre nosotros todas sus hermanas? ¿De dónde, pues, ha sacado todas estas cosas?”. Y se negaban a creer en él.
Entonces, Jesús les dijo: “Un profeta no es despreciado más que en su patria y en su casa”. Y no hizo muchos milagros allí por la incredulidad de ellos.
Palabra del Señor.
R. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Inflama, Señor, bondadosamente nuestros corazones con el fuego celestial del Espíritu, tú que concediste a san Alfonso María celebrar estos misterios y ofrecerse a sí mismo por medio de este santo sacrificio. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
Cfr. 1 Cor 1, 23-24
Nosotros predicamos a Cristo crucificado: a Cristo, fuerza de Dios y sabiduría de Dios.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios nuestro, que quisiste que san Alfonso María fuera un fiel administrador y predicador de este gran misterio, concede a tus fieles participar con frecuencia en él y que, al recibirlo, te alaben sin cesar. Por Jesucristo, nuestro Señor.
PARA MEDITAR
En ocasiones, el misterio de la Encarnación nos impide entrar en la sabiduría de Jesús. ¿Cuántas veces nos ha sucedido que son los más pequeños y los más humildes quienes nos revelan a Dios?
"Sálvanos, Señor, de la incredulidad para que nos adentremos en tu mensaje y te reconozcamos en la cotidianidad. Amén."
Fuente: misalcatolico.com
Categoria: Misa por Año / Misal Catolico 2025 / Misal Catolico de agosto 2025
Misal de Hoy Publicado: 2025-07-30T21:01:26Z | Modificado: 2025-07-30T21:01:26Z