Santa Misa del día: Lunes 4 de Diciembre de 2017
Morado Feria o San Juan Damasceno, presbítero y doctor de la Iglesia M R. pp. 130 (146) y 844 (879) / Lecc, I. p. 357
Otros santos: Osmundo de Salisbury, obispo; Bárbara de Nicomedia, mártir.
LA SUBIDA A SIÓN
Is 2, 1-5; Mt 8, 5-11
El profeta Isaías no había perdido la esperanza en que las personas aprendieran a vivir con sensatez. Después de tantas experiencias de corrupción e injusticia, seguía mirando con ojos esperanzados hacia el futuro: extranjeros de distintas regiones y culturas vecinas, experimentarían una curiosidad y una sed de conocer al Señor. Ese momento cumbre daría inicio a una nueva civilización marcada por la superación de la violencia militar y el comienzo de una cultura de paz y respeto. De manera germinal apreciamos una pequeña muestra de dicho cambio en el pasaje evangélico: un centurión romano que probablemente controlaba el puesto de guardia en Cafarnaúm se acerca confiadamente a Jesús. Es claro que no se convierte en su discípulo, pero dispone de una gran confianza en la palabra de Jesús, de igual manera el soldado advierte la autoridad extraordinaria de dicha palabra y se abandona plenamente, sabiendo que no quedará defraudado. Jesús responde generosamente a su confianza.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Jer 31, 10; Is 35, 4
Escuchen, pueblos, la palabra del Señor y anúncienla en todos los rincones de la tierra: He aquí que vendrá nuestro Salvador, ya no tengan miedo.
ORACIÓN COLECTA
Ayúdanos, Señor Dios nuestro, a esperar ardorosamente la venida de tu Hijo Jesucristo, para que cuando llegue y llame, nos encuentre esperándolo en la oración y alegrándonos en su alabanza. El, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
El Señor reúne a todos los pueblos en la paz eterna de su reino.
Del libro del profeta Isaías: 2,1-5
Visión de Isaías, hijo de Amos acerca de Judá y Jerusalén: En días futuros, el monte de la casa del Señor será elevado en la cima de los montes, encumbrado sobre las montañas, y hacia él confluirán todas las naciones.
Acudirán pueblos numerosos, que dirán: "Vengan, subamos al monte del Señor, a la casa del Dios de Jacob, para que él nos instruya en sus caminos y podamos marchar por sus sendas. Porque de Sión saldrá la ley, de Jerusalén, la palabra del Señor".
El será el árbitro de las naciones y el juez de pueblos numerosos. De las espadas forjarán arados y de las lanzas, podaderas; ya no alzará la espada pueblo contra pueblo, ya no se adiestrarán para la guerra. ¡Casa de Jacob, en marcha! Caminemos a la luz del Señor. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 121, 1-2.3-4a. (4b-5. 6-7) 8-9.
R/. Vayamos con alegría al encuentro del Señor.
¡Qué alegría sentí, cuando me dijeron: "Vayamos a la casa del Señor"! Y hoy estamos aquí, Jerusalén, jubilosos, delante de tus puertas. R/.
A ti, Jerusalén, suben las tribus, las tribus del Señor, según lo que a Israel se le ha ordenado, para alabar el nombre del Señor. En ella están los tribunales de justicia, en el palacio de David. R/.
Digan de todo corazón: "Jerusalén, que haya paz entre aquellos que te aman, que haya paz dentro de tus murallas y que reine la paz en cada casa". R/.
Por el amor que tengo a mis hermanos, voy a decir: "La paz esté contigo". Y por la casa del Señor, mi Dios, pediré para ti todos los bienes. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Sal 79, 4
R/. Aleluya, aleluya.
Señor y Dios nuestro, ven a salvarnos; míranos con bondad y estaremos a salvo. R/.
EVANGELIO
Muchos vendrán de oriente y occidente al Reino de los cielos
Del santo Evangelio según san Mateo: 8, 5-11
En aquel tiempo, al entrar Jesús en Cafarnaúm, se le acercó un oficial romano y le dijo: "Señor, tengo en mi casa un criado que está en cama, paralítico, y sufre mucho". Él le contestó: "Voy a curarlo".
Pero el oficial le replicó: "Señor, yo no soy digno de que entres en mi casa; con que digas una sola palabra, mi criado quedará sano. Porque yo también vivo bajo disciplina y tengo soldados a mis órdenes; cuando le digo a uno: '¡Ve, él va; al otro: ¡Ven!', y viene; a mi criado: ¡Haz esto!', y lo hace".
Al oír aquellas palabras, se admiró Jesús y dijo a los que lo seguían: "Yo les aseguro que en ningún israelita he hallado una fe tan grande. Les aseguro que muchos vendrán de oriente y de occidente y se sentarán con Abraham, Isaac y Jacob en el Reino de los cielos".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, estos dones que te ofrecemos, tomados de los mismos bienes que nos has dado, y haz que lo que nos das en el tiempo presente para aumento de nuestra fe, se convierta para nosotros en prenda de tu redención eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I o III de Adviento, MR, pp. 484-486 (485-487).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr Sal 105. 4-5; Is 38, 3
Ven, Señor, a visitarnos con tu paz, para que nos alegremos delante de ti, de todo corazón.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Te pedimos, Señor, que nos aprovechen los misterios en que hemos participado, mediante los cuales, mientras caminamos en medio de las cosas pasajeras, nos inclinas ya desde ahora a anhelar las realidades celestiales y a poner nuestro corazón en las que han de durar para siempre. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien: San Juan Damasceno. Presbítero y doctor de la Iglesia MR, p. 844 (879).
Cuando colaboraba con la administración árabe, Juan escuchó el llamamiento a la vida monástica (hacia 710). Se estableció en el monasterio de san Sabás, situado en el desierto de Jadeó, de donde sólo salía para predicar en Jerusalén. De estas predicaciones proviene su libro "Exposición de la fe ortodoxa". Fue un decidido defensor del culto a las sagradas imágenes (hacia 675-749).
Del Común de pastores: para un pastor. p. 900 (939), o del Común de doctores de la Iglesia, p. 909 (948).
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Señor, que nos sirvan de ayuda las oraciones del presbítero san Juan Damasceno, para que la verdadera fe, que él enseño de manera tan eminente, sea siempre nuestra luz y nuestra fortaleza. Por nuestro Señor Jesucristo...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Contempla, Señor, los dones que presentamos en tu altar en la conmemoración de san Juan Damasceno, y del mismo modo que, por estos santos misterios, le diste a él la gloria, concédenos también a nosotros tu perdón. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Mt 24, 46-47
Dichoso el servidor a quien su amo, al volver, lo encuentre cumpliendo con su deber; yo les aseguro que le confiará todos sus bienes.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que esta mesa celestial, Dios todopoderoso, robustezca y aumente el vigor espiritual de todos los que celebramos la festividad de san Juan Damasceno, para que conservemos íntegro el don de la fe y caminemos por el sendero de la salvación que él nos señaló. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Fuente: misalcatolico.com
Categoria: Misa por Año / Misal Catolico 2017 / Misal Catolico de diciembre 2017
Misal de Hoy Publicado: 2021-09-15T18:20:30Z | Modificado: 2021-09-15T18:20:30Z