Misal Católico

¡Instala nuestra app para disfrutar de una mejor experiencia en tu dispositivo móvil!

Google Play App Store
Cerrar

Santa Misa del día: Domingo 3 de Mayo de 2020

Blanco IV Domingo de Pascua Domingo del Buen Pastor Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones sacerdotales y religiosas [Se omite la fiesta de la Santa Cruz] MR, p. 367 (368) / Lecc. I, p. 105

Otros santos: Beato Tomás Acerbis de Olera, religioso de la Orden de los Hermanos Menores Capuchinos.

LA PREGUNTA FUNDAMENTAL
Hech 2, 14. 36-41; 1 Pe 2,20-25; Jn 10,1-10

La parábola del Buen Pastor expone con imágenes poéticas lo que el apóstol san Pedro proclama con lenguaje llano acerca del itinerario de acceso a la fe cristiana. La palabra de Jesús, Buen Pastor, se ofrece a los oídos de cualquier oyente, sin embargo, solamente aquellos que saben escuchar y se disponen a recibido con el corazón abierto, consiguen iniciar el camino del arrepentimiento que conduce a la confesión del señorío único de Jesucristo. Del mismo modo, tal como lo registra san Lucas en los Hechos de los Apóstoles, solamente aquellos de entre los hijos de Israel que escuchan el mensaje cristiano, con un corazón bien dispuesto, consiguen acoger de buen grado el testimonio del apóstol Pedro. La fuerza del Espíritu que obra discretamente no violenta la libertad del creyente. Cada persona es responsable de sus decisiones creyentes.

ANTÍFONA ENTRADA Cfr. Sal 32,5-6

La tierra está llena del amor del Señor y su palabra hizo los cielos. Aleluya.

ORACIÓN COLECTA

Dios todopoderoso y eterno, te pedimos que nos lleves a gozar de las alegrías celestiales para que tu rebaño, a pesar de su fragilidad, llegue también a donde lo precedió su glorioso Pastor. Él, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.

LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA

Dios lo ha constituido Señor y Mesías.

Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 2, 14. 36-41

El día de Pentecostés, se presentó Pedro, junto con los Once, ante la multitud, y levantando la voz, dijo: "Sepa todo Israel con absoluta certeza, que Dios ha constituido Señor y Mesías al mismo Jesús, a quien ustedes han crucificado".
Estas palabras les llegaron al corazón y preguntaron a Pedro y a los demás apóstoles: "¿Qué tenemos que hacer, hermanos?". Pedro les contestó: "Conviértanse y bautícense en el nombre de Jesucristo para el perdón de sus pecados y recibirán el Espíritu Santo. Porque las promesas de Dios valen para ustedes y para sus hijos y también para todos los paganos que el Señor, Dios nuestro, quiera llamar, aunque estén lejos".
Con éstas y otras muchas razones, los instaba y exhortaba, diciéndoles: "Pónganse a salvo de este mundo corrompido". Los que aceptaron sus palabras se bautizaron, y aquel día se les agregaron unas tres mil personas. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.


SALMO RESPONSORIAL

Del salmo 22, 1-3a. 3b-4. 5. 6.
R/. El Señor es mi pastor, nada me faltará. Aleluya.

El Señor es mi pastor, nada me falta; en verdes praderas me hace reposar y hacia fuentes tranquilas me conduce para reparar mis fuerzas. R/.
Por ser un Dios fiel a sus promesas, me guía por el sendero recto; así, aunque camine por cañadas oscuras, nada temo, porque tú estás conmigo, tu vara y tu cayado me dan seguridad. R/.
Tú mismo me preparas la mesa, a despecho de mis adversarios; me unges la cabeza con perfume y llenas mi copa hasta los bordes. R/.
Tu bondad y tu misericordia me acompañarán todos los días de mi vida; y viviré en la casa del Señor por años sin término. R/.

SEGUNDA LECTURA

Han vuelto ustedes al pastor y guardián de sus vidas.

De la primera carta del apóstol san Pedro: 2, 20b-25

Hermanos: Soportar con paciencia los sufrimientos que les vienen a ustedes por hacer el bien, es cosa agradable a los ojos de Dios, pues a esto han sido llamados, ya que también Cristo sufrió por ustedes y les dejó así un ejemplo para que sigan sus huellas.
El no cometió pecado ni hubo engaño en su boca; insultado, no devolvió los insultos; maltratado, no profería amenazas, sino que encomendaba su causa al único que juzga con justicia; cargado con nuestros pecados, subió al madero de la cruz, para que, muertos al pecado, vivamos para la justicia. Por sus llagas ustedes han sido curados, porque ustedes eran como ovejas descarriadas, pero ahora han vuelto al pastor y guardián de sus vidas. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 10, 14
R/. Aleluya, aleluya.

Yo soy el buen pastor, dice el Señor; yo conozco a mis ovejas y ellas me conocen a mí. R/.

EVANGELIO

Yo soy la puerta de las ovejas.

Del santo Evangelio según san Juan: 10, 1-10

En aquel tiempo, Jesús dijo a los fariseos: "Yo les aseguro que el que no entra por la puerta del redil de las ovejas, sino que salta por otro lado, es un ladrón, un bandido; pero el que entra por la puerta, ése es el pastor de las ovejas. A ése le abre el que cuida la puerta, y las ovejas reconocen su voz; él llama a cada una por su nombre y las conduce afuera. Y cuando ha sacado a todas sus ovejas, camina delante de ellas, y ellas lo siguen, porque conocen su voz. Pero a un extraño no lo seguirán, sino que huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños".
Jesús les puso esta comparación. pero ellos no entendieron lo que les quería decir. Por eso añadió: "Les aseguro que yo soy la puerta de las ovejas. Todos los que han venido antes que yo, son ladrones y bandidos; pero mis ovejas no los han escuchado. Yo soy la puerta; quien entre por mí se salvará, podrá entrar y salir y encontrará pastos. El ladrón sólo viene a robar, a matar y a destruir. Yo he venido para que tengan vida y la tengan en abundancia". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Se dice Credo

PLEGARIA UNIVERSAL

Levantemos, hermanos, nuestros ojos a Cristo, obispo y pastor de nuestras almas, y pongamos en sus manos, con toda confianza, las necesidades de los hombres diciendo: Te rogamos, Señor. (R/. Te rogamos, Señor.) Jesús, Buen Pastor, sálvanos.
Para que los obispos, los presbíteros y diáconos apacienten santamente a los pueblos que tienen encomendados, roguemos al Señor.
Para que la paz que Jesucristo concedió a los discípulos arraigue con fuerza en nuestro mundo, y se alejen de las naciones el odio y las guerras, roguemos al Señor.
Para que los enfermos, los pobres y todos los que sufren encuentren en Cristo resucitado luz y esperanza, roguemos al Señor.
Para que Dios derrame en las familias cristianas el espíritu de piedad y de renuncia a lo mundano, de manera que germinen abundantes vocaciones al ministerio eclesial, roguemos al Señor.
Dios todopoderoso y eterno, que en tu Hijo, vencedor de la muerte, nos has abierto las puertas de la salvación, escucha nuestra oración e infunde en nuestro corazón la sabiduría de tu Espíritu, para que no nos dejemos seducir por las voces engañosas del mundo, sino que reconozcamos y sigamos siempre la voz de tu Hijo, el buen pastor, que nos da vida, y vida abundante, y que vive y reina, inmortal y glorioso, por los siglos de los siglos.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Concédenos, Señor, vivir siempre llenos de gratitud por estos misterios pascuales que celebramos, para que, continuamente renovados por su acción se conviertan para nosotros en causa de eterna felicidad. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Prefacio I-V de Pascua, p. 504-508 (500-504).

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN

Ha resucitado el Buen Pastor, que dio la vida por sus ovejas y se entregó a la muerte por su rebaño. Aleluya.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Buen Pastor, vela con solicitud por tu rebaño y dígnate conducir a las ovejas que redimiste con la preciosa sangre de tu Hijo, a las praderas eternas. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, p. 608 (603).

UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- En tiempos donde se propagan formas de fanatismo político y religioso de diversa índole conviene acentuar que, la relación genuina del creyente con Jesucristo no impide vivir la fe en consonancia con el llamado pensamiento crítico. Nuestra fe en la muerte y resurrección de Jesús, lo mismo que la exigencia de vivir relaciones marcadas por la caridad, la justicia y el amor a los necesitados, no nos otorgan ningún aval de superioridad moral sobre los demás, ni nos exentan de traspasar las fronteras de la dignidad humana en ninguna circunstancia. Un verdadero discípulo de Jesús sabe discernir con fe inteligente los llamados que el Señor Jesús le va planteando a lo largo de su existencia. El símil del discípulo con las ovejas no debe entenderse como una espiritualidad favorable a la docilidad acrítica, ni a la manipulación.

Fuente: misalcatolico.com


Categoria: Misa por Año / Misal Catolico 2020 / Misal Catolico de mayo 2020

Misal de Hoy Publicado: 2021-09-15T18:20:48Z | Modificado: 2021-09-15T18:20:48Z