Santa Misa del día: Sabado 11 de Marzo de 2017
Morado Feria de Cuaresma, o Misa votiva de Santa María de Guadalupe* MR p. 207 (218) / Lecc. I p. 719
Otros santos: Pionio de Esmirna, mártir; Domingo Cam, mártir; Esteban de Obacina, abad.
AMEN A SUS ENEMIGOS
Deut 26, 16-19; Mt 5, 43-48
Nunca ha sido sencillo amar a los que nos hacen el mal. Tampoco lo es ahora. De entre todos los mandamientos que Moisés transmitió a Israel y que el pueblo fue adaptando y perfeccionando, no aparece una exigencia tan radical como la que plantea el Señor Jesús a sus discípulos. No solamente estamos invitados a renunciar a devolver mal por mal, vengándonos de los que nos han ofendido; sino que además el Señor Jesús nos anima a responder con buenas actitudes y buenas obras. Además de suplicar e interceder por nuestros verdugos, tenemos que buscar la manera de amarlos. Una forma de lograrlo es extirpando, en primer lugar, el rencor de nuestro corazón; además, es necesario realizar acciones concretas de tolerancia, respeto y caridad en su favor. Si conseguimos animarlos a vivir de forma más humana, renunciando a la violencia mental y física hacia ellos, estaremos cumpliendo la voluntad del Padre compasivo.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 18, 8
La ley del Señor es perfecta y reconforta los corazones; el testimonio del Señor es veraz y vuelve sabios a los sencillos.
ORACIÓN COLECTA
Convierte a ti, Padre eterno, nuestros corazones, para que, buscando siempre lo único necesario y poniendo en práctica las obras de caridad, nos concedas permanecer dedicados a tu servicio. Señor. Por nuestro Señor Jesucristo.
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Serás un pueblo consagrado al Señor, tu Dios.
Del libro del Deuteronomio: 26, 16-19
En aquel tiempo, habló Moisés al pueblo y le dijo: 'El Señor, tu Dios, te manda hoy que cumplas estas leyes y decretos; guárdalos, por lo tanto, y ponlos en práctica con todo tu corazón y con toda tu alma.
Hoy has oído al Señor declarar que Él será tu Dios, pero sólo si tú caminas por sus sendas, guardas sus leyes, mandatos y decretos, y escuchas su voz.
Hoy el Señor te ha oído declarar que tú serás el pueblo de su propiedad, como Él te lo ha prometido, pero sólo si guardas sus mandamientos. Por eso Él te elevará en gloria, renombre y esplendor, por encima de todas las naciones que ha hecho y tú serás un pueblo consagrado al Señor, tu Dios, como Él te lo ha prometido'.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 118, 1-2. 4-5. 7-8
R/. Dichoso el que cumple la voluntad del Señor.
Dichoso el hombre de conducta intachable, que cumple la ley del Señor. Dichoso el que es fiel a sus enseñanzas y lo busca de todo corazón. R/.
Tú, Señor, has dado tus preceptos para que se observen exactamente. Ojalá que mis pasos se encaminen al cumplimiento de tus mandamientos. R/.
Te alabaré con sincero corazón, cuando haya aprendido tus justos mandamientos. Quiero cumplir tu ley exactamente. Tú, Señor, no me abandones. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO 2 Co 6, 2
R/. Honor y gloria a ti, Señor Jesús.
Este es el tiempo favorable, este es el día de la salvación. R/.
EVANGELIO
Sean perfectos, como su Padre celestial es perfecto.
Del santo Evangelio según san Mateo: 5, 43-48
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: 'Han oído ustedes que se dijo: Ama a tu prójimo y odia a tu enemigo. Yo, en cambio, les digo: Amen a sus enemigos, hagan el bien a los que los odian y rueguen por los que los persiguen y calumnian, para que sean hijos de su Padre celestial, que hace salir su sol sobre los buenos y los malos, y manda su lluvia sobre los justos y los injustos.
Porque, si ustedes aman a los que los aman, ¿qué recompensa merecen? ¿No hacen eso mismo los publicanos? Y si saludan tan sólo a sus hermanos, ¿qué hacen de extraordinario? ¿No hacen eso mismo los paganos? Sean, pues, perfectos como su Padre celestial es perfecto'.
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Te rogamos, Señor, que, por la gracia de este santo sacramento, seamos dignos de alcanzar la conversión. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I- V de Cuaresma, MR, pp. 492-496 (493-497).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 5, 48
Sean perfectos, como su Padre celestial es perfecto.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Acompaña, Señor, con eterna benevolencia a tu pueblo, al que fortaleces con estos divinos misterios, y, ya iluminado con tus celestiales enseñanzas, acompáñalo con el consuelo de tu salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE EL PUEBLO
Opcional.
Fortalezca, Señor Dios, a tus fieles tu anhelada bendición, para que nunca nos apartemos de tu voluntad y nos alegremos siempre de tus beneficios. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien: Misa votiva de Santa María de Guadalupe* MR, p. 1137 (1185).
ANTÍFONA DE ENTRADA Lc 2, 34-35
Simeón los bendijo, y a María, la Madre de Jesús, le anunció: 'Este niño ha sido puesto para ruina y resurgimiento de muchos en Israel, como signo que provocará contradicción, para que queden al descubierto los pensamientos de muchos corazones'.
ORACIÓN COLECTA
Padre misericordioso, tú que asociaste a la Madre de tu Hijo a su pasión dolorosa, y a nosotros, con sufrimientos de esta vida nos permites también participar en ella, concédenos gozar siempre de la ayuda maternal de la Virgen María. Por nuestro Señor Jesucristo...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Padre bueno, que estos dones se conviertan en el Cuerpo y en la Sangre de tu Hijo, para que, por el sacrificio de tu altar, al que estuvo asociada íntimamente la Virgen María, sean para nuestro bien la fuente de la salvación, y así alcancemos la vida eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Lc 11, 28
¡Dichosos los que escuchan la Palabra de Dios y la cumplen!
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Padre santo, alimentados en esta mesa celestial, concédenos que la recepción del Cuerpo y la Sangre de tu Hijo nos inflame en el mismo amor con que María santísima nos recibió como hijo, cuando estaba al pie de la cruz. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Otros santos: Pionio de Esmirna, mártir; Domingo Cam, mártir; Esteban de Obacina, abad.
AMEN A SUS ENEMIGOS
Deut 26, 16-19; Mt 5, 43-48
Nunca ha sido sencillo amar a los que nos hacen el mal. Tampoco lo es ahora. De entre todos los mandamientos que Moisés transmitió a Israel y que el pueblo fue adaptando y perfeccionando, no aparece una exigencia tan radical como la que plantea el Señor Jesús a sus discípulos. No solamente estamos invitados a renunciar a devolver mal por mal, vengándonos de los que nos han ofendido; sino que además el Señor Jesús nos anima a responder con buenas actitudes y buenas obras. Además de suplicar e interceder por nuestros verdugos, tenemos que buscar la manera de amarlos. Una forma de lograrlo es extirpando, en primer lugar, el rencor de nuestro corazón; además, es necesario realizar acciones concretas de tolerancia, respeto y caridad en su favor. Si conseguimos animarlos a vivir de forma más humana, renunciando a la violencia mental y física hacia ellos, estaremos cumpliendo la voluntad del Padre compasivo.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 18, 8
La ley del Señor es perfecta y reconforta los corazones; el testimonio del Señor es veraz y vuelve sabios a los sencillos.
ORACIÓN COLECTA
Convierte a ti, Padre eterno, nuestros corazones, para que, buscando siempre lo único necesario y poniendo en práctica las obras de caridad, nos concedas permanecer dedicados a tu servicio. Señor. Por nuestro Señor Jesucristo.
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Serás un pueblo consagrado al Señor, tu Dios.
Del libro del Deuteronomio: 26, 16-19
En aquel tiempo, habló Moisés al pueblo y le dijo: 'El Señor, tu Dios, te manda hoy que cumplas estas leyes y decretos; guárdalos, por lo tanto, y ponlos en práctica con todo tu corazón y con toda tu alma.
Hoy has oído al Señor declarar que Él será tu Dios, pero sólo si tú caminas por sus sendas, guardas sus leyes, mandatos y decretos, y escuchas su voz.
Hoy el Señor te ha oído declarar que tú serás el pueblo de su propiedad, como Él te lo ha prometido, pero sólo si guardas sus mandamientos. Por eso Él te elevará en gloria, renombre y esplendor, por encima de todas las naciones que ha hecho y tú serás un pueblo consagrado al Señor, tu Dios, como Él te lo ha prometido'.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 118, 1-2. 4-5. 7-8
R/. Dichoso el que cumple la voluntad del Señor.
Dichoso el hombre de conducta intachable, que cumple la ley del Señor. Dichoso el que es fiel a sus enseñanzas y lo busca de todo corazón. R/.
Tú, Señor, has dado tus preceptos para que se observen exactamente. Ojalá que mis pasos se encaminen al cumplimiento de tus mandamientos. R/.
Te alabaré con sincero corazón, cuando haya aprendido tus justos mandamientos. Quiero cumplir tu ley exactamente. Tú, Señor, no me abandones. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO 2 Co 6, 2
R/. Honor y gloria a ti, Señor Jesús.
Este es el tiempo favorable, este es el día de la salvación. R/.
EVANGELIO
Sean perfectos, como su Padre celestial es perfecto.
Del santo Evangelio según san Mateo: 5, 43-48
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: 'Han oído ustedes que se dijo: Ama a tu prójimo y odia a tu enemigo. Yo, en cambio, les digo: Amen a sus enemigos, hagan el bien a los que los odian y rueguen por los que los persiguen y calumnian, para que sean hijos de su Padre celestial, que hace salir su sol sobre los buenos y los malos, y manda su lluvia sobre los justos y los injustos.
Porque, si ustedes aman a los que los aman, ¿qué recompensa merecen? ¿No hacen eso mismo los publicanos? Y si saludan tan sólo a sus hermanos, ¿qué hacen de extraordinario? ¿No hacen eso mismo los paganos? Sean, pues, perfectos como su Padre celestial es perfecto'.
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Te rogamos, Señor, que, por la gracia de este santo sacramento, seamos dignos de alcanzar la conversión. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I- V de Cuaresma, MR, pp. 492-496 (493-497).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 5, 48
Sean perfectos, como su Padre celestial es perfecto.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Acompaña, Señor, con eterna benevolencia a tu pueblo, al que fortaleces con estos divinos misterios, y, ya iluminado con tus celestiales enseñanzas, acompáñalo con el consuelo de tu salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE EL PUEBLO
Opcional.
Fortalezca, Señor Dios, a tus fieles tu anhelada bendición, para que nunca nos apartemos de tu voluntad y nos alegremos siempre de tus beneficios. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien: Misa votiva de Santa María de Guadalupe* MR, p. 1137 (1185).
ANTÍFONA DE ENTRADA Lc 2, 34-35
Simeón los bendijo, y a María, la Madre de Jesús, le anunció: 'Este niño ha sido puesto para ruina y resurgimiento de muchos en Israel, como signo que provocará contradicción, para que queden al descubierto los pensamientos de muchos corazones'.
ORACIÓN COLECTA
Padre misericordioso, tú que asociaste a la Madre de tu Hijo a su pasión dolorosa, y a nosotros, con sufrimientos de esta vida nos permites también participar en ella, concédenos gozar siempre de la ayuda maternal de la Virgen María. Por nuestro Señor Jesucristo...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Padre bueno, que estos dones se conviertan en el Cuerpo y en la Sangre de tu Hijo, para que, por el sacrificio de tu altar, al que estuvo asociada íntimamente la Virgen María, sean para nuestro bien la fuente de la salvación, y así alcancemos la vida eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Lc 11, 28
¡Dichosos los que escuchan la Palabra de Dios y la cumplen!
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Padre santo, alimentados en esta mesa celestial, concédenos que la recepción del Cuerpo y la Sangre de tu Hijo nos inflame en el mismo amor con que María santísima nos recibió como hijo, cuando estaba al pie de la cruz. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Fuente: misalcatolico.com
Categoria: Misa por Año / Misal Catolico 2017 / Misal Catolico de marzo 2017
Misal de Hoy Publicado: 2021-09-15T18:20:27Z | Modificado: 2021-09-15T18:20:27Z